Un semestre en cuarentena

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Niall Binns

Resumen

El domingo 8 de marzo de este año tuvo lugar en Madrid una multitudinaria manifestación para celebrar el Día Internacional de la Mujer. La marcha, que partió de la Estación de Atocha para acabar en la Plaza de España, fue encabezada por varias ministras, dos de las cuales, al igual que la mujer del presidente (que las acompañó en primera fila), se enfermarían del Covid-19 durante la semana siguiente. Según la crónica de la pandemia narrada por la oposición, la “agenda” feminista del gobierno le impidió prohibir el acto, aun sabiendo que ponía en riesgo la salud de los ciudadanos, y fue ahí donde se originó el mal. Se olvidan de que nadie podía imaginar aún la magnitud del virus, se olvidan de que en esa fecha seguía muy bajo el nivel de contagio, se olvidan de que tampoco se impidieron, ese fin de semana, otros actos multitudinarios como, por ejemplo, el partido de fútbol entre el Betis y el Real Madrid. Nunca en mi vida he visto tanta mezquindad, tanta hipocresía política como en estos últimos meses en España.

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Sección
Dossier: Memorias de un confinamiento